La extraordinaria labor social que llevan a cabo en Villa Carlos Paz, Cristian Abratte y Gabriela Barroso, se intensifica mes a mes, a pesar de las dificultades económicas y personales, que pueda llegar a tener esta familia de luchadores.
Ellos brindan alimentos a través de Panza caliente, un merendero que abrieron en 2017 en el barrio Miguel Muñoz (Calle Brasil 445), a más de 250 personas por mes, entre niños, jóvenes, adultos y ancianos de la ciudad, en situación de vulnerabilidad.
Abren las puertas del lugar, un salón que alquilan y pagan mensualmente con sus propios sueldos, los días lunes, miércoles y viernes de 17 a 19 hs. Además, recientemente apostaron a colaborar un nuevo día, los sábados al mediodía, para dar el almuerzo a todas las familias necesitadas de su barrio, de 11,30 a 13 hs.
Gabriela es trabajadora inmobiliaria, y Cristian, policía. Hace unos meses atrás, ella se enteró de una noticia inesperada: que padecía cáncer de mama. Sin embargo, nada detuvo su determinación de seguir ayudando a la gente de su barrio y continuó adelante. Actualmente se encuentra en muy buen estado de salud, transitando con entereza su tratamiento y recuperación.
Según cuenta Cristian, tras enterarse de su problema, Gabriela le dijo con determinación: “Panza caliente no se cierra, tiene que salir adelante, somos necesarios para mucha gente”, y así fue como continuaron y crecieron en solidaridad, amor y contención para todos.
“En estos días, estamos sirviendo alrededor de 800 tazas de leche por semana, y el sábado pasado hicimos 75 pizzas, el primer día que hicimos el almuerzo. Lamentablemente hubo gente afuera un rato, esperando para poder comer, dado que fueron 220 personas. A veces nos desborda la cantidad de gente que viene a comer. La verdad que nunca pensamos que iría tanta gente a almorzar. También les dimos frutas a niños y sus mamás”, contó Cristian en conversación con Qué Hacemos má?!
De las personas que se acercan al merendero, 170 son niños y se suman de 2 a 3 familias nuevas por mes.
“Aunque seguimos con las mismas mesas y sillas de cuando comenzamos el merendero, les hacemos un lugarcito a todos”, aseguró el hombre.
Panza caliente, se sostiene además, gracias a la colaboración de comerciantes y vecinos del barrio y alrededores, “Todos nos ayudan con los alimentos para la gente, y Don Jorge de Club Lechero, trae de 60 a 70 litros de leche por semana, según lo que haya podido recaudar, porque también le brinda leche a otros merenderos de la ciudad. Nosotros usamos 17 litros de leche por día, así que en tres días se consume lo donado”, detalló Cristian.
Para ayudar con Panza Caliente, pueden comunicarse a los teléfonos 3541 650241 ó 3541 317045.