Hacía 10 años que Fernando Ramírez, el actor cómico, imitador, humorista y cantante mendocino no regresaba a Villa Carlos Paz, para hacer temporada. Este 2019 volvió al escenario la mano del productor Daniel Guzmán, junto a Miguel Pardo.
Conocido por sus desopilantes participaciones en Videomatch y Showmatch, programas de TV de Marcelo Tinelli, junto a Pachu Peña, Pablo Granados y Freddy Villarreal, entre otros, donde imitó a diferentes personalidades; y después de hacer una sucesión de temporadas en Mar del Plata, el artista decidió presentar “Humor, imitaciones y mucha música”, en espacio LVISA (restaurante del Casino) de la ciudad, de jueves a sábados a las 23 hs.
Algunos de los personajes que imita Fernando en su show musical humorístico, son Jorge Lanata, Ricardo Montaner, Ricardo Arjona, Cacho Castaña, Luis Miguel, Andrea Bocelli, los cordobeses Luis juez y Fabio Moli.
El espectáculo fusiona algunas obras de gran éxito del artista, donde las imitaciones están hechas desde la parodia, como un vehículo para el humor y la catarsis colectiva.
El cómico, quien antes de trabajar en la pantalla catódica junto a Marcelo Tinelli, ya había recorrido con su dúo Stan y Lasky, Argentina y otros países, hasta llegar a Europa, no se considera un imitador, sino un humorista.
“Soy un humorista que imita. Un imitador, por ahí tiene que ver más con lo purista de las voces, incluso la imitación fue posterior en mi carrera. Yo llegué a Videomatch siendo humorista y cantante, y justo Marcelo en ese momento necesitaba que todos imitáramos, entonces lo hicimos. Pero mi esencia siempre ha sido ser actor, comediante y cantante”, expresó Fernando en una entrevista realizada en el Hotel Linz de Villa Carlos Paz.
Amoldarse a las propuestas artísticas
Como artista trabajó en el teatro, la radio y la televisión. Llegó a tener un programa propio de humor en América, Comedido. Además, realizó temporada de verano con personalidades como Carmen Barbieri, Moria Casán y Martín Bossi.
“Fui director y guionista de revistas, trabajé con Jorge Corona, con Hugo Varela, con Moria, Carmen. Yo traía un combo completo, entonces de acuerdo a la necesidad de cada espectáculo, me iba amoldando”, comentó el artista sobre la variedad de roles que desempeñó en teatro.
Cuando pudo volver a hacer sus propios espectáculos, se sintió más a gusto sobre el escenario. “Gané la Estrella de Mar, el premio al teatro en Mar del Plata con mi espectáculo Copycat. En mis propios espectáculos, como ese, puedo ser autor, actor, humorista, guionista, cantante, todo en uno”, aseguró.
Detrás de la máscara
La primera obra en la que Fernando Ramírez trabajó para Marcelo Tinelli fue Match Humor. Compartió escenario con Martín Bossi, Roberto Peña, Pichu Straneo y Sebastián Almada, en Mar del Plata. Desde aquel entonces y durante mucho tiempo, actuó con máscaras, imitando a diferentes personajes, y eso hizo que éstos fuesen más conocidos que él mismo, como actor.
“Casi siempre usaba máscara, mis personajes eran famosos, pero yo no. Le pasaba lo mismo a Bossi, porque Pichu y Almada ya eran conocidos a nivel masivo, entonces ya no les pesaba tanto ponerse una máscara como a nosotros”, recordó el actor.
Comedidos, el programa de TV de América fue la propuesta que lo hizo más popular, pero el gran reconocimiento se dio cuando comenzó a presentar sus propios personajes, dejando de lado las imitaciones.
“Cuando empecé a hacer mis personajes, fue cuando gané el Martín Fierro, el año pasado. Fue mi corolario, recién ahí la gente comenzó a darse cuenta de quién era. Antes, era un famoso desconocido. La máscara influyó de esa forma en mi carrera”, reconoció Fernando.
Un premio recordado
Con Stan y Lasky, recibió el premio Carlos a la Revelación de la temporada en el año 2000. Se lo entregó el creador del galardón, el periodista cordobés Ramón Yardá, distinción que recuerda con mucho cariño. Además, Fernando Martínez participó de recordadas obras como La risa es bella, con Freddy Villarreal y Sebastián Almada y Alegría ortomolecular, junto a Moria Casán, Álvaro Navia, Andrea Rincón y otros.
El artista no sólo ganó la codiciada Estrella de Mar, sino que también fue distinguido internacionalmente con la Gaviota en el Festival de Viña del Mar de Chile.
Una temporada difícil
En relación a la temporada teatral 2019, Fernando aseguró que se trata de un momento muy difícil para los artistas. “No la comparo con esos años que vine a Carlos Paz, porque ha pasado mucho tiempo, pero cambió mucho el país en general. Carlos Paz sigue siendo un centro de atracción fortísimo turísticamente, pero creo que el país ha cambiado para mal, sobre todo para la clase media, que es la que sostiene lugares como Mar del Plata o Carlos Paz”.
Y agregó: “La clase media está pasando un mal momento, entonces es lógico que en una situación así, la gente apele primero a satisfacer sus necesidades básicas, antes que a comprar una entrada de teatro. Y si lo hace, elige muy bien la obra, apuntando a lo mediático”.
Respecto a sus proyectos artísticos, el artista reflexionó: “Nunca estuve planeando demasiado qué hacer primero, y qué luego, se fue y se va dando todo. Soy un agradecido de la vida de poder vivir de lo que amo. Mis amores son el teatro, la televisión y la radio, en ese orden. Siempre tuve ese manto de piedad de la vida que me dice: bueno, vos dale, que van a salir cosas. Los caminos, en en el mundo del espectáculo y más en Argentina, nunca se pueden planear tanto”.